Me acuerdo que un verano nos dio por pintar zapatillas, a mi hermana y a mi, ya os he hablado de nuestra debilidad por pintarrajear cualquier cosa. Yo acababa de volver de la erasmus en Milán, y allí habíamos descubierto una tienda genial donde te pintaban las zapatillas, las que tu llevases o las que ellos vendían, con tus ideas o con las suyas. Nosotras comprabamos las Victoria falsas del sacristán y les hacíamos de todo.
No se dónde han ido a parar aquellas zapatillas, pero al encontrar este libro de D.Jarosch y H.Klingel me he acordado de ellas. Aquí hay ilustraciones de las sneakers (zapatillas de deporte en cool) más famosas en blanco y negro. Si hubiese caído en nuestras manos entonces lo habríamos llenado de colorines.
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